Tras fracasar en su tribulación celestial, Lucía Vega renace como personaje secundario de una novela que leyó antes de morir. Con un carácter desenvuelto y bondadoso, y de nunca dejarse pisotear, decide desafiar su destino predestinado y librar sus propias batallas de ingenio contra quienes quieren verla caer.
Marta despierta en una escena comprometedora: intenta seducir a un hombre. Decidida, huye de inmediato. Teniendo como familia a 3 genios, se olvida de los hombres y se concentra en su antigua profesión de doctora, en criar a su hijo y en hacer una fortuna.